ME HICISTE MAL Y SIN EMBARGO TE QUIERO

Cuando una noticia se publica en algún medio gráfico o televisivo, es imposible no ver acompañada la nota por alguna imagen ilustrativa (anque alusiva). Para muestra basta un botón con los “reyes” de la pantalla chica: Crónica televisión. Las noticias, en general, se transmiten mediante móviles en vivo desde el lugar del hecho, pero de no haber imagen alguna, recurren a la famosa placa roja (ej: “Murieron tres personas y un boliviano”, prefiero ahorrar el comentario de esto para otro post). Otros medios, esta vez sobre papel, son los diarios, especialmente “el gran diario argentino”, Clarín, que, con su mórbido contraste, publica grandes fotografías imponiendo terribles títulos: “Terremoto y 10 mil muertos en China”. Y la foto que alecciona mide 10 x 15 cm y muestra a una mujer tironeada por un hombre para sacarla de entre los escombros. Me pregunto: ¿es necesario tanta imagen? ¿estamos preparados para el bombardeo de violencia que nos dan los medios? Y sí, creo firmemente que sí, porque está más que comprobado que la sociedad argentina necesita sangre o violencia para actuar, para reaccionar. Para saber qué sucedió en oriente con el tifón y los terribles tsunamis hemos visto colección de fotografías de cuerpos flotando en medio de grandes extensiones de agua, gente indigente en situación de desnutrición o extremo sufrimiento, así como las fotos que mostraban las torturas de soldados norteamericanos contra civiles iraquíes. También accedimos a las fotos de las maestras denunciadas por mantener relaciones sexuales con colegas en medio de las instituciones a las que pertencían, y muchas imágenes más. Estamos más que acostumbrados a conocer “malas” noticias que aquellas que imprimen esperanza. Nos gusta la mediocridad de la tragedia o la violencia cotidiana, consumimos televisión basura basada en pequeñas o grandes malaventuras de los distintos personajes de turno que desfilan por la bien llamada “caja boba”. Un programa televisivo como “Policías en acción” levanta más de 10 puntos de rating, y está basado en acciones policiales, donde deben ejercer, mayormente, altos grados de violencia. Argentinos, estamos mal acostumbrados.

Ammé Bisau